Nuestras Historias


22-02-2008 Organizacion de nuestro local



Mis queridos socios de AxA:

¿Se nota que estoy emocionada?...pues lo estoy, esto marcha viento en popa. Diréis que soy una ”lila” (como diría Jordi), pero es que estoy encantada, con la gente y con el trabajo que se está realizando.

Hoy, por ejemplo, os contaré que tres socios: Juanqui, Fernando y Jose luis, han estado desde la 9:30 hasta las 16:00 Horas, sin parar, poniendo la dichosa tarima en el local. Y digo sin parar, porque hasta el bocata y la cervecita se lo han tomado entre serrín y madera. ¡Claro! Así decía Jose Luis: “el bocata de tortilla estaba de muerte” (cualquier bocata le hubiera sabido de muerte).

Mirad…les ha costado centrarse como 40 minutos, no era fácil, eran tres para acoplarse y una tarima jodia, jodia ( la muy pu…ya había sido utilizada en varias ocasiones y ya no se dejaba tan fácilmente meter mano). Pero, transcurrido ese tiempo, han empezado como máquinas: Juanqui ,instintivamente , ha monopolizado la máquina ingletadora, ora recorte aquí, ora recorte allá…mientras una insidiosa capa de polvo de serrín le iba envolviendo entero. Al final no se le distinguían los ojos y la boca de la cara. Fernando es poco hablador, pero es un autentico “machaca”, no se cansaba, ora arriba, ora agachado…una máquina, y eso que poner tarima no es lo suyo, que lo suyo son los ascensores. Jose Luis me confesaba que lo suyo siempre han sido los papeles y la oficina, pero no iba a permitir que le dejaran atrás “esos dos” así que, entre tablón y llamadas telefónicas, iba dando el “do” de pecho…hasta que, perplejos, hemos oído el grito “ME RINDO” y ante nuestros pasmados ojos se ha tirado en el suelo cuan largo, en forma de cruz y ha permanecido cinco minutos muerto. Nosotros, respetuosos con las manifestaciones espontáneas de nuestro compañero, hemos seguido la faena.

Ha querido el destino que un lugareño se acercara al local, atraído por el ruido de la máquina. Asomando el hocico nos ha saludado y ha hecho un par de comentarios relacionados con la tarima y lo fácil que es ponerla “esto en un pis-pas se pone”. Ha querido el Santísimo que este buen hombre se fuera antes de oir el comentario de Juanqui :”la madre que le parió, en un pis-pas”… ó algo así.

Quedaban 4 metros para terminar definitivamente el suelo, a Jose Luis ya no le sujetaban las piernas. Extendemos lo que quedaba de manta y…¡horror! No nos llegaba, no podíamos terminar.

En fin, que nos ha faltado por poner eso, 4 metros de tarima. Yo sé que a Fernando le ha fastidiado no terminar, Juanqui, realista, se ha conformado, pero Jose Luis…El suspiro de éste se ha oído en Africa “menos mal, ya no podía más”.

Y así ha sido, amigos, la jornada de hoy. Todo un tratado de generosidad, trabajo en equipo y voluntad. Lecciones que me enseñan y gratifican enormemente. Al final, despidiéndonos, Jose Luis hizo un último comentario:” no tengo más remedio que hacerme socio de esta Asociación (el socio es Fernando), siendo socio no podré reclamarle daños y perjuicios”. Así que eso, QUE ENCIMA TENEMOS UN SOCIO MAS.

Por cierto, no quiero despedirme sin deciros que cuando Juanki se iba le oí quejarse por lo bajini “¡mis riñones!).

Queridos míos ¡ha sido un autentico placer!.
Besos. MAR