Nuestras Historias
15-05-2009 Raid Solidario Semana Santa 2009
“Raid Solidario Rekkam-Ouzina Semana Santa 2009”
Me gustaría recordar que “Amigos Unidos por África” nació un buen día en que 14 chalados de los coches 4x4, que cuantas veces podían viajaban a disfrutar del vecino continente africano, de sus noches y de su cielo, de sus dunas y de sus pedregales, de sus colores y de sus montañas y de la amabilidad y hospitalidad de sus gentes, decidieron que, junto al placer de disfrutar de esos parajes naturales y de ese aire limpio, también podrían dedicar una parte de sus futuros viajes a compensar y agradecer y ayudar a quienes nos ceden su tierra, su sonrisa y su hospitalidad, aún careciendo de casi todo.
En base a este objetivo de Amigos x África, es por lo que se intenta atraer a la Asociación a quienes comparten su idea de dar algo a cambio de lo mucho que disfrutan en su tierra; es por lo que un día cargaron sus coches para llevar ayuda y medicamentos al Atlas; es por lo que utilizaron sus vehículos y sus vacaciones para llevar ayuda a la región de Nouamghar (Mauritania), y por lo que se comprometieron en la construcción del Orfanato de Nouadhibou (Mauritania). Y es, en definitiva, por lo que se han propuesto no sólo llevar ayuda a sus gentes, si no apoyarles a desarrollarse en su espacio y en su entorno y devolverles algo de lo mucho que disfrutan en cada viaje que realizan a ese maravilloso continente que es…. ÁFRICA.
En esta línea, es como se planificó este RAID SOLIDARIO; en parte para disfrutar del Erg Chebbi y de sus dunas, de la imperial ciudad de Marrakech, de los colores de sus montañas y de la inmensidad de sus planicies y, como contrapartida, llevar un poco de ayuda a las gentes de dos de los territorios más inhóspitos de la tierra: el Plateau de Rekkam y la zona de Ouzina. Además, en Ouzina, con la inestimable colaboración de nuestro amigo Jordi Guardiola, de KASBAH OUZINA, que hizo de coordinador y nexo de unión entre Ibrahim y Amigos x África, llevar a buen termino la subvención y construcción de dos pozos de agua potable para el abastecimientos de personas y con un abrevadero para los animales……. y así fue, como doce coches nos pusimos en marcha, y así fue como ha discurrido el viaje:
TERRACAN con Edu y Dani, NISSAN Navara con Paco, Ines y Naïs, TOYOTA-KXR con Arturo, Yolanda y Usue, SUZUKI JIMNY con Guillermo y Mónica, BMW -X5 con Jorge y Nieves, NISSAN PATROL con Miguel y Santiago, DISCOVERY con Manolo, Begoña, Jose, Marta y Victor, TOYOTA LAND CRUISER con Sergio, Carmen, Maria, Sergio Jr, y Hector, TOYOTA LAND CRUISER con Jordi, DISCOVERY “Butanito” con Luis Nieto y Jose Luis, TOYOTA-KXR con Luis Presi, Marisa y Lula, y TOYOTA LAND CRUISER con Toni, Blanquita y Tamara.
Viernes 3 de Abril:
Desde Villalba, las 10:30 de la mañana salen cuatro coches y por el camino se van uniendo el resto de vehículos, excepto el de Jordi que viene de Barcelona por la carretera de la costa, y que se nos une en el mismo puerto de Almería.
De los 12 coches previstos para el Raid, el Terracan de Edu y Dani se nos queda a 160 Km. de Almeria, con un diagnóstico de rotura de la caja transfer…. que “supuestamente” en el concesionario oficial de Villalba le habían puesto nueva. Se deja el coche pero….. la Solidaridad en el grupo aparece en ese mismo momento y los pasajeros y la carga de Ayuda Humanitaria que lleva este vehículo, se distribuye entre los demás coches, pues nadie está dispuesto a que falten a la llamada de África. Qué pena que no podrán disfrutar del placer de conducir por las dunas y los pedregales, o al menos, no todo el tiempo. Otra vez será.
Ya con todos los vehículos reunidos en el Puerto, empiezan los primeros contactos entre el grupo; todos nerviosos, expectantes y entusiasmados, algunos, los menos, ya han viajado alguna vez a Marruecos, pero para la mayoría es su primera vez .
Un picoteo y un montadito antes de embarcar, primera foto de grupo en el puerto, y a las 11 de la noche decimos adiós a España y embarcamos vehículos y pasajeros, rumbo a Nador donde llegaremos alrededor de las siete de la mañana.
Sábado 4 de Abril:
A las 7 h. llegamos a Nador. Tres coches del grupo desembarcan rápidamente, pero no pueden salir todos los coches, pues una de las plataformas del barco se avería -con razón este barco se llama “Wisteria”-. Una hora después salimos del barco, y dos horas más tarde conseguimos pasar la frontera: es un “peaje extra” que siempre hay que pagar al entrar en este país, pero ya estamos en Marruecos y a partir de ahora aplicaremos el proverbio árabe “la prisa mata”.
Nos reunimos todo el grupo para poner las emisoras, antenas, gps, y las pegatinas del Raid, de Amigos x África y también las de todas las empresas que de una u otra forma han colaborado en el patrocinio de este Raid. (AVOT-informática, AVOT-construcciones, INUVIK, NACEX, SOLO AUTO 4x4, RIGIDISC, PROIMAGEN, SER 4x4 y EL ALFAR).
Para empezar a entrar en acción, a “Butanito”, uno de los cuatro coches de la Organización, se le rompe el manguito del líquido de dirección nada más pasar la aduana. “Butanito” es un coche poderoso, pero especialista en romper un manguito cada vez que baja a África. El resto de coches continúan ruta y, para no variar, se queda con “Butanito” otro coche de la Organización, el de Toni. No sólo porque él es un experto mecánico sino porque, además, su espíritu de “Teresa de Calcuta” le impide dejar a nadie atrás, yendo siempre de “coche escoba” de la caravana. ¡Gracias Toni; qué sería de estos viajes sin ti!
La pericia y rapidez para arreglar cualquier cosa en Marruecos, y en África en general, no deja de asombrarnos; un tornero hace un nuevo manguito (¡10 €!), el mecánico lo reemplaza y, a toda pastilla, los dos coches se reúnen con el resto de los coches en el Way Point (WP a partir de ahora) nº. 1, donde la expedición toma el sol plácidamente tras una frugal comida, y a partir de ahí seguimos ruta aunque a veces, nos encontramos con nuevas carreteras o que se reforman las antiguas y los caminos. A ratos por pistas y a ratos por carretera, finalmente acampamos entre los WP’s 14 y 15, en vez de en el nº. 22 como estaba previsto, pues ya empieza a anochecer.
Oímos por las emisoras a nuestros amigos Fernando y Rosa que también andan por esos parajes con su hijo Gabri: les damos nuestra coordenada y se vienen y acampan con el grupo. Cuando terminamos de montar el campamento, todos echamos mano al forro polar que Amigos x África ha entregado a los participantes. Parecemos una “gran nube azul” y nos viene estupendamente para la ocasión, pues hace un frío que pela.
Se les canta el “Happy birthday” a Marta, hija de Begoña, y a José Luís, pues cumplen 21 y 61 años, respectivamente y, entre cubatas, chistes de Jorge, Dani y Santi y las canciones de Carmen con Jorge a los coros, el deleite de los aventureros es total. Poco a poco el respetable se va retirando y metiendo en sus cálidos sacos de dormir porque la temperatura es bien fresca y, por la noche, llega a “neutra”, es decir, ni frió ni calor (“0º”) y mañana debemos levantarnos a las 6,30 h…. o al menos eso se nos dice.
Domingo 5 de Abril:
A los 300 Km. de pista que debemos hacer hoy (Erfoud, Rissani, Merzouga), debemos agregar los WP’s que no hicimos ayer.
Amanece un “poco” antes de lo previsto y a las 5 de la mañana ya no duerme nadie, pues como decía Fernando, “al portero anoche se le olvidó poner la calefacción”. ¡Vaya frio¡
Los más escandalosos ya están liándola y, o te levantas, o te levantan… Las tiendas amanecen cubiertas de escarcha; desayuno rápido y a disfrutar como cosacos del Plateau de Rekkam, que está lleno de vegetación. ¡Incluso hay zonas de cereal sembrado!; fantástico, exuberante, lujurioso, nunca habíamos visto así esta zona: ha sido un año de lluvias espectacular y, muy probablemente, no volveremos a verlo igual en muchos años.
Después de sacar al Presi de un bochinche inoportuno, cogemos una pista que nos lleva entre un precioso río a la derecha y un monte pelado a la izquierda y, de pronto, el río se convierte en un espléndido palmeral de varios kilómetros. Aunque apetece explorarlo, tenemos que continuar camino. Vamos en busca de las Haimas de los nómadas para dejarles la ayuda (alimentos, ropa de abrigo, mantas, y botiquines básicos) que cada vehículo ha preparado para ellos. La entrega se hace por grupos: un par de coches o tres paran en una Haima y el resto sigue y para en otras.
Así nos acercamos hasta un paso entre montañas en el que Inés, con la Navara, hizo sus primeros pinitos trialeros. Jorge no daba crédito a lo que podía hacer con su X5 y Miguel y Santi, con los ojos fuera de las orbitas, balbuceaban por la emisora que por ahí era imposible bajar… Pero con calma, paciencia, el buen hacer y dirección de Jordi, Toni y el Presi, bajaron todos con la adrenalina en las cejas y, para reponer fuerzas, hicimos un alto en el camino y tomamos un refrigerio. Continuamos sin perder nunca de vista las montañas de colores tan diferentes y llegamos hasta el final de una pista en la que enlazamos con otra que, para nuestra sorpresa, nos encontramos asfaltada. A las 19 p.m. llegamos al Aubergue Les Dunes D’or: ¡desde las 7 a.m. que empezamos la ruta! El día ha sido intenso, el paisaje hermoso y el hotel muy acogedor y ¡con ducha calentita y cena reparadora!
Nos encontramos con Fernando, que también pernocta en un hotel vecino. Los cubatas de rigor y a reponer fuerzas para mañana.
Lunes 6 de Abril:
Hoy toca disfrutar. Desayunamos, casi todos, a las 8 h. (Miguel y Santiago siguen con el reloj una hora atrasado…) y, tras comprar pan y poco más, salimos hacia las dunas. Nadie quiere quedarse ni en la piscina del hotel, ni de compras en Rissani o Erfoud: está claro que el espíritu aventurero impera por doquier. Todos quieren enfrentarse al Erg Chebbi, con sus inmensas dunas de arena finísima y color cambiante. Bajamos presión a las ruedas y, a continuación, pasamos a tantear la arena. Con un cursillo acelerado para sentir la respuesta de los coches y coger un poco de soltura, empezamos a “dunear”. La temperatura es agradable, la arena está perfecta y durante toda la mañana no tenemos que hacer uso del material de “desatasco” ni una sola vez, y eso que varios conductores son noveles en dunas y en conducción de 4x4.
Todos están exultantes: Guillermo y Mónica, con su Jimmy, quedan bautizados como “vuela-dunas”; Dani y Edu tienen la buena fortuna de poder volar sobre las dunas, conduciendo el mítico “Butanito”, pues Luis tiene un tirón en un gemelo y no le conviene conducir; Jorge y Nieves, con su SUPER-X5, disfrutan como locos y Santi y Miguel no quieren saber nada de trialeras y se declaran duneros aguerridos.
Tras la comida, bajo la sombra de una gigantesca acacia, reiniciamos la aventura. Esta vez la arena está más caliente y suelta que por la mañana, por lo que hay que sacar del apuro a más de uno que se queda “empanzado” o “enganchado”, pero nada de importancia; y, como premio a nuestra pericia al volante, llegamos hasta el lago, con sus sugerentes dunas al fondo. Pero las numerosas lluvias han convertido las orillas del lago en una trampa y, al acercarse demasiado, hay que ayudar a más de uno a salir de aquel barrizal ¡Una aventura más que contar…!
Mientras tanto, y antes de que nos sorprenda una tormenta de arena, aprovechamos para entregar a los chiquillos unas mochilas con gorras, camisetas, lápices, caramelos y diversas chucherías que NACEX nos ha enviado, y también les compramos colgantes, fósiles, etc., para luego exponerlo en nuestros mercadillos solidarios de Guadalix.
De camino al Albergue, pasamos por la gasolinera de Rissani para llenar los tanques y los Jerrycan de gasolina, pues mañana nos espera en Ouzina un día lleno de actividades y de sorpresas.
Antes de cenar, algunos aprovechamos para darnos un refrescante bañito en la piscina y chapotear como locos en el agua helada. Y, como no podía ser de otra manera, terminamos la noche reunidos junto a la piscina tomando unas copillas, pues la coca-cola estaba allí “especialmente barata”.
Martes 7 de Abril:
A las 8,30 salimos hacia Ouzina por una ruta variada y preciosa (otros la llamarían infernal), con arena, polvo, “oueds”…: se trata de la mítica “Pista Prohibida”, llamada así por ir paralela a la frontera argelina. Como siempre, Jordi al frente del primer grupo, que cierra Luís Nieto y el Presi al frente del segundo grupo, que cierra nuestro Ángel de la Guarda, Toni.
Llegamos a la Kasbah Ouzina, lugar donde pasaremos la noche y punto de encuentro con nuestro amigo Jordi Guardiola, que nos ha servido de enlace para la construcción de los Pozos y se nos ha ofrecido de “cicerone” para visitar la zona. Nos ofrecen un té delicioso y unos frutos secos y nos ponemos en marcha de nuevo. Con una latente tormenta de aire y arena llegamos al primero de los dos pozos construidos bajo el patrocinio de Amigos x África: un brocal y un abrevadero ubicado en medio de la nada, y que sirve para abastecer a personas y animales que vienen desde 10 ó 15 Km. Sacamos un cubo de agua del pozo limpia y fresquísima y más de uno del grupo se aventuran a beberla y, debo aclarar que, sin ningún tipo de consecuencias posteriores.
Colocamos con orgullo el azulejo conmemorativo de AxA, y que nos ha sido donado por la empresa “EL ALFAR”, y nos hacemos la foto que inmortalice nuestra visita a este lugar y a este pozo que ya sentimos como nuestro y que seguro visitaremos en más de una ocasión.
Seguimos rumbo y, atravesando un enorme lago seco donde en algunos momentos hay dos metros de polvo en suspensión -advertimos continuamente por la emisora para que guarden la distancia de seguridad y avisen si tienen que pararse-, llegamos hasta el paso de Maharch, donde se encuentra el segundo de los pozos de AxA y donde se ha hecho la misma construcción que en el anterior: el brocal y el abrevadero para los animales, y de nuevo procedemos a la inauguración, sacando un cubo de agua y manoteando y mojándonos unos a otros, mientras se coloca el azulejo conmemorativo y nos hacemos las consabidas fotos.
Allí mismo hay una Kasbah, donde Jordi nos ha encargado la comida. Almorzamos muy bien (ensalada, tajín y frutas). Entretanto, a Jordi Guardiola le surge un problema y tiene que marcharse, pero con nosotros se quedan sus compañeros Enrique y Hassan, que nos acompañarán hasta el poblado para hacer la entrega de toda la ayuda que A x A ha preparado para las aproximadamente 25 familias de Ouzina, consistente en:
• unos 220 Kg. de alimentos no perecederos (garbanzos, lentejas, arroz, harina, cacao, galletas, latas de conservas, aceite, etc.).
• 30 Bolsas de ropa, sobre todo para niños.
• 30 Botiquines básicos, para las familias.
• 1 caja con medicamentos específicos, para su administración por parte del Sanitario del pueblo.
• 45 bolsas y/o mochilas, especialmente preparadas para los niños, con gorras, camisetas, juguetes, pelotas, bolis, lápices de colores, libretas, cepillos dentales, jabones, esponjas, peines, caramelos etc.
Volvemos, en dirección contraria, por el tortuoso y polvoriento Oued hasta llegar a la casa que la “Asociación de Ouzina” tiene en el mismo poblado y donde nos están esperando para ofrecernos un delicioso y típico té marroquí con hierba-buena, pastas y unos exquisitos frutos secos. Allí conocemos a Ibrahim que es la persona que está al frente de la “Asociación para el desarrollo de Ouzina”, y nos cuenta que él es quien ha construido los brocales y abrevaderos de los pozos y nos presenta a un antiguo militar que ahora hace las veces de sanitario. Descargamos toda la ayuda y la dejamos en el local; nos comentan que las familias pasarán por allí para recogerla y abastecerse. Como es habitual, los crios se arremolinan alrededor de los coches y, las preciosas y tímidas niñas, nos miran con sus enormes ojos. Pasamos un rato con ellos y conversando con la gente de la Asociación; luego nos despedimos de todos, que se muestran muy agradecidos… no será la última vez que AxA pase por aquí.
Como siempre nos ocurre, sentimos que nos falta tiempo para tener más contacto personal con las familias, pero el gesto y el esfuerzo ya está hecho y aún nos quedan varios Kms., por pistas polvorientas y con conductores “casi noveles”, para llegar hasta la Kasbah Ouzina, donde nos han preparado una Haima para cenar un riquísimo cuscús.
Después de la cena, para no variar, unas copas, unos intercambios de ritmos africanos y cantos andaluces con nuestros amigos Ibrahim, Hassan y todos los allí presentes, muchas risas y mejor ambiente…; pero mañana nos espera un día duro hasta llegar a Marrakech y, no excesivamente tarde, decidimos retirarnos a dormir a nuestras Haimas bajo un cielo africano plagado de estrellas.
Miércoles 8 de Abril:
Más nos vale haber dormido bien, porque hoy toca, nuevamente, jornada larga al volante: de no menos de 12 horas, antes de cubrir los 600 Kms. que nos separan de Marrakech. Allí nos esperan Mar y Fran y todos estamos ya deseando darles un abrazo.
Nos ponemos en marcha a las 8:15 y, durante hora y media, hacemos pista hasta Merzouga, donde tomamos carretera de asfalto, pasamos Mecissi y llegamos a Alnif, donde repostamos gasoil y limpiamos o cambiamos los filtros de aire (que llevan una duna de polvo dentro de ellos); en el “super X5”, después de desarmar medio coche, no consiguen acceder al filtro, pero como le sobra potencia, tira sin problemas.
Continuamos camino y nueva comida campestre y frugal tras pasar el primer gran puerto del día.
De nuevo en marcha, pasamos Ouarzazate y comenzamos la ascensión del segundo gran puerto del día, el puerto de Tizi-n-Tichka, perteneciente a la cordillera del Alto Atlas, con las emisoras de los coches informando ininterrumpidamente, con una nitidez no siempre clara debida a los tremendos picachos. Pero el espíritu de equipo ya es un hecho desde hace días y, lo que pueda faltar en nitidez, sobra en deseos de facilitarle la conducción y la próxima curva al coche que nos sigue.
En plena bajada, al “Jimny” la dirección le hace un extraño y las ruedas parece que vayan a salirle despedidas. Todo el grupo sigue ruta, y tres coches, el de Arturo, el del Presi y, cómo no, nuestro Toni, se quedan con él haciendo cambios de ruedas y pruebas varias y escoltándole hasta el hotel al que llegaron sin novedad, prácticamente a la vez que el resto del grupo.
Por fin llegamos al desbarajuste circulatorio de Marrakech, y al Hotel Golden Tulip Farah Marrakech, a eso de las 8,45 p.m., donde abrazamos cálidamente a Mar y Fran, que se incorporan al Raid a partir de aquí, y que ya han supervisado la cena de hoy, la comida y la Gymkhana del día siguiente: en fin, en su línea de que este viaje nos resulte inolvidable a todos los demás.
Cenamos espléndidamente y caemos rendidos en las mulliditas camas de nuestras confortables habitaciones, tras una maravillosa ducha de agua calentita… y tras más de 12 horas de coche.
Jueves 9 de Abril:
Hoy volvemos a cambiar el “chip” y toca diversión cultural y ajetreo físico: para que el viaje sea completo de verdad, hemos preparado a nuestros íntrepidos viajeros una Gymkhana en la que deben buscar por toda la ciudad 36 lugares, y fotografiarlos, responder diversas cuestiones relacionadas con dichos lugares, más 4 pruebas especiales y 4 fotos especiales.
Nos concentramos los cuatro equipos que hemos formado en la Mezquita de la Koutoubia. Tras un briefing inicial, en el que se explican los diversos aspectos a tener en cuenta y los horarios oficiales, se da la señal de salida y los cuatro equipos, con nuestros GPS’s y nuestras cámaras fotográficas, nos lanzamos como posesos a buscar lugares, preguntar, fotografiar y volver a buscar, hasta las 13,30 h. en que nos reagrupamos en la Plaza Jemma El Fna (“La Gran Plaza de Marrakech”) para almorzar suculentamente en la terraza del Restaurante Les Prèmices, y seguir correteando la ciudad y buscando rincones perdidos, hasta las 18 h. en que nos volvemos a reagrupar en la Gran Plaza, donde se entregan las fotos y las muestras de las pruebas especiales para ser evaluadas.
El día se ha vivido intensamente pero, “el mal del Faraón” (como le llaman en Egipto a las fuertes gastroenteritis de los turistas), aunque menos frecuente en Marruecos que en otros países, ha afectado a tres de nuestros treinta y cinco aventureros. Menos mal que es un mal pasajero y que contamos con Santiago, que es Médico, y con Inés y Marta, que “están en ello”, aunque esta última también se ha visto afectada. Este contratiempo ha mermado el número de participantes en la Gymkhana, pero ha sido en cualquier caso la mejor forma de conocer la ciudad, incluso para los que ya la han visitado en bastantes ocasiones, pues la meticulosidad de las explicaciones, con coordenadas, mapas, reglamento, puntuación, etc., nos han permitido visitar todos los puntos neurálgicos de la ciudad.
El día ha sido duro y la afluencia a la Gran Plaza, después de cenar, por parte de nuestro grupo, es casi testimonial: solo Pepe, de “El Arca”, parece tener ganas y fuerzas para ir a la Plaza Jemma El Fna y, según nos dice, dista mucho de ser lo que cabría esperarse en un Jueves Santo y a las 11 de la noche; se ve que la crisis, por unas u otras razones, en este caso por la falta de turismo, también afecta a los países en vías de desarrollo, y en mayor grado a los que, como éste, tienen en el turismo su fuente de ingresos principal.
Mañana pretendemos desayunar a las 8,30 para salir a las 9,30… Pretendemos.
Viernes 10 de Abril:
¡¡¡Huy!!!, casi, casi lo logramos, pues salimos a las 9,50 h. y con todos nuestros enfermitos bien o casi bien.
Tomamos autopista de peaje dirección Casablanca, Rabat (donde almorzamos en un McDonald’s, como es tradición en AxA siempre que estamos de regreso), Kenitra, Larache, Tánger, Melloussa y a las 7,15 de la tarde llegamos al Hotel Karia Kabila, donde la temperatura es fresca y el viento fuerte y, donde después de la cena, se entregan los premios y trofeos a los campeones de las diferentes pruebas o a los que se han hecho acreedores de los mismos por acciones o comportamientos fuera de lo común a lo largo del Raid.
Modestia aparte, hemos de admitir que somos un grupo modélico, pues no hay ni coche ni familia que no haya ganado algo ¡¡¡somos estupendos!!! Tanto, que Mónica y el Sr. Ingeniero del “Jimny”, así como Begoña, Manolo y Pepe de “El Arca”, nos invitan a todos a una barbacoa en sus respectivos hogares.
La entrega de trofeos comienza, como no podría ser de otra manera, con la entrega de “Copa de Honor” a nuestro “Grumete” el pequeño Sergio, que ha demostrado que puede seguir durante horas, la incansable charla por la Emisora de nuestro Franelo.
El equipo vasco (Arturo, Yolanda y Usue), junto a Nieves, Jorge y José Luis, ganaron la Gymkhana (pala articulada para la arena y una eslinga), aunque alguna que otra lengua viperina sugirió que podrían haber hecho “alguna que otra trampa”; pero, ni hablar. Lo que pasa es que el “mal del faraón” no afectó a ninguno de sus miembros y eso ya fue una ventaja. Además, como bien dijo Fran en el briefing, lo que no estuviese expresamente prohibido, estaba permitido; así que su victoria fue limpia y demostró su manifiesta superioridad y lo “aguilillas” que eran sus componentes.
Mónica y Guillermo ganaron el premio al vehículo salta dunas, los centauros del desierto.
“El Arca” (Begoña, Manolo, Pepe, Marta y Víctor), como no, se hizo acreedora, desde el primer minuto, al vehículo más “acogedor”, ya que además de sus 5 tripulantes, más los que accidentalmente tuviese que coger, llevaba su “fauna particular”, y algo así como ¡1.500 peluches!...
“La Larga” o “La Navara” (Paco, Inés y Naïs), lograron la recompensa al coche más “pupas”, con más averías en su haber, que bochinches tiene el Plató de Rekkam.
El premio al “Super-Copi”, fue conseguido con honores por Edu que, aunque novato, demostró sobradamente, cual es la función de un gran copiloto. Este chico promete.
Miguel y Santiago, como no, obtuvieron el premio a los “sufridores”: sufridores en las trialeras, sufridores en las autopistas, en todos los cruces de carrteras y los desvíos a las gasolineras…
Y nuestra amiga “Carmen de España”, junto a su fiel Jorge, se llevaron el premio al “salero”: dos ejemplares de saleros marroquíes dieron fe de su arte sin límites cantando, contando chistes; en definitiva, alegrando a sus compañeros en todo momento, por duros que éstos fueran.
Hasta los que cumplieron años durante el Raid, Marta y José Luis, obtuvieron un recuerdo de este viaje inolvidable.
Además, todos los vehículos participantes obtuvieron un “trofeo” que, esperamos, lleven siempre en ellos, como “la aventura más grande jamás completada”. Se trataba de una babucha en miniatura, que esperemos les recuerden siempre los buenos momentos vividos.
Y con este feliz recuerdo, más por los abrazos que nos dimos, por la calidez de los aplausos que todos recibimos y por el “buen rollo” que había existido durante todo el viaje, que por los trofeos ganados, nos fuimos a nuestros bonitos bungalows a prepararnos mentalmente para la vuelta mañana a… a nuestro mundo civilizado.
Sábado 11 de Abril:
Desayunamos a las 7 y antes de las 7,30 ya vamos camino de la frontera ceutí, que está a diez minutos del hotel.
Los trámites burocráticos aduaneros a la salida de Marruecos son, como siempre, más simples y rápidos que los de la entrada. Tomamos el ferry y antes de las 11 h. (ya las 13 horas en España) estamos en Algeciras.
Miguel y Santiago, haciendo gala al trofeo ganado, se despistan y deciden volver a Madrid vía Tarifa, Cádiz, Sevilla, Córdoba y Bailen (lo que al final no les impediría llegar a Madrid a la misma hora que a los demás).
El resto tomamos la autopista de peaje hacia Málaga, parando a almorzar, como también es tradicional en AxA a la vuelta de África, en el Restaurante Montes, en plena subida del Puerto de Las Pedrizas (huevos fritos con patatas).
Antes, nos ha dejado Jordi; aquí nos deja el equipo vasco y todo sigue sin contratiempos hasta que a las 20,15 h. y a 150 Kms. de Madrid “El Arca” de Manolo nos asusta con lo que parece ser un pequeño problema de inyectores, que se soluciona sobre la marcha y que es la parada que aprovechamos para darnos un último abrazo, ya que a partir de ahí cada vehículo se dirige a casita eligiendo su propio camino. ¿Para cuando el próximo Raid?.